jueves, 30 de mayo de 2013

YO TENÍA UN BLOG

Y Meryl Streep tenía una granja en África. Ambos lo perdimos. Ella debido a un gusto lamentable para elegir a los maridos y no demasiado mejor para los amantes. Yo debido a que nunca he podido soportar durante demasiado tiempo la sensación de estar haciendo algo que no tiene sentido.

Así que dejé el blog, y me fui de vacaciones. Pensé un montón de lugares paradisiacos. Resorts, vicios, lujos, playas privadas.... pero no había presupuesto, así que prefiero hacer de la necesidad virtud y decir que soy de natural ascético y que no me va el rollo hedonista y vacío. Y entonces tuve una idea genial. De vez en cuando pasa, y este año tocaba, por lo que se ve: si el mundo está hecho una mierda, si todos los demonios están aquí, el infierno está vacío. ¿Por qué no elegirlo como lugar de vacaciones? Cálido, amplio, con vestigios de historias interesantes, conservando en sus paredes la esencia de personajes carismáticos (por distintas razones, que no vamos a entrar a valorar: el carisma es como es). Y solitario. Ahora mismo estoy aqui, sólo, con tiempo para escribir, para pensar, y para añorar todo aquello que me agobiaba cuando vivía en el mundo real. Ya se sabe que las vacaciones son para eso: para echar de menos el trabajo. Y para darse cuenta de que uno no soporta a su mujer, pero ese es otro tema, y además aquí no aplica porque me he venido solo.

Creo que me pasaré una temporada por aquí, contando las anécdotas que acontezcan por mi atormentada alma. Para empezar, les diré que a la entrada había un cartel que decía: abandonad toda esperanza, vosotros, los que aquí entráis.

Esperanza, dice. Todavía me estoy riendo.

Suyo atentamente, desde el infierno

SS Morgenstern.

No hay comentarios:

Publicar un comentario